Aunque todos estamos acostumbrados a la presencia del ascensor en nuestra vida, existen muchos datos sobre este artefacto que muchos no conocemos. Para empezar, los ascensores son considerados como 20 veces más seguros que las escaleras. ¿Lo sabías? Y aun así, hay personas que todavía sienten miedo al subirse a él porque creen que las probabilidades de que se rompa son altas. Eso sí, un ascensor será tan seguro siempre y cuando se mantenga en buen estado y se lleve a cabo un mantenimiento periódico de toda la estructura.
Además de este falso mito sobre la seguridad de los ascensores, hay muchas más curiosidades que probablemente no conozcas. En este artículo te contamos algunas.
En la Edad Medía ya había ascensores
Antiguamente también existía la necesidad de transportar elementos pesados o personas a diferentes niveles de altura, y para ello se utilizaban diferentes mecanismos mecánicos cuya diferencia con los ascensores de hoy en día radica en la fuente de energía que se empleaba. En aquel caso, se utilizaba la fuerza animal, humana o hidráulica.
Elevadores a vapor
Este mecanismo se trataba de un ascensor que funcionaba con la fuerza del vapor como fuente de energía. Se creó en 1853 por el conocido Otis, inventor norteamericano, que presentó al mundo un elevador capaz de funcionar con la energía que emite el vapor de agua. Para probarlo, fue el mismo Otis quien se subió al ascensor para demostrar su veracidad.
Los ascensores de la Torre Eiffel
En 1889 y cuando la tecnología de los ascensores todavía no estaba muy avanzada, el propio Otis presentó 5 ascensores en la popular Exposición Universal de París para instalarnos en la Torre Eiffel, y usando la propulsión hidráulica para funcionar. Todo un reto si tenemos en cuenta que este monumento lo forman 324 metros de altura.
Ascensores actuales
Los ascensores modernos como los conocemos hoy en día no aparecen hasta finales del siglo XIX. Un ascensor muy similar a los actuales, que usaban la energía eléctrica para funcionar y subir y bajar pisos.
Cómo regular la velocidad
A inicios del siglo XX, la ciudad de Nueva York ya contaba con ascensores en algunos de sus altos edificios. Lo curioso es que en ellos existía la forma de regular la velocidad para la seguridad de las personas. La máxima velocidad que podía alcanzar un ascensor era los 200 metros por minuto, aunque con la construcción del Empire State, aumentó a los 300 metros por minuto.
Seguridad de los ascensores
El único accidente registrado causado por la rotura del carro tuvo lugar en 1945, y también en el Empire State. El accidente se debió a que un avión bombardero se estrelló contra el edificio y partió los cables de dos ascensores. Uno de ellos se encontraba en el piso 75 con una señora en su interior, pero afortunadamente, sobrevivió.
Los ascensores más rápidos del mundo
Los ascensores más rápidos hasta ahora están localizados en Taiwan, en un edificio llamado Taipei 101. Este edificio cuenta con 101 plantas y desde la primera hasta la última el trayecto tiene una duración de sólo 39 segundos, es decir 1010 metros por minuto. Estos aparatos están dotados de sistemas de control y son sistemas aerodinámicos para minimizar las vibraciones y los efectos del aire.